Un poco de mi

Cuando era pequeña, no pensaba que crecería, a decir verdad, no lo creía. Solo veía a mis compañeros correr y correr, mientras pasaba por mi pequeña mente que los adultos no podían hacerlo porque ya eran grandes (y por adultos me refiero a padres y madres, y a todos los pubertos). De repente, los recuerdos que pasan cuando veo a una niña sola, loca e interesante, me demuestran que siempre fui una persona en si, solitaria. Pero nunca me importó porque me encerraba conmigo misma, tanto que hasta llegue a escribir cosas, a pesar de tener tan solo siete años de edad.
Tenia deseos de hacer un disco de música clásica, tocando el piano; y a los cinco minutos, decidía cantar en vez de tocar y es cuando empecé a creer que algún día podría decirle a él, el pequeño niño que se convirtió en mi razón por la cual podría escribir cualquier cosa del mundo no mas para recitarcelo; era de saberlo, yo era toda una romántica sin saber que era lo que significaba.
A decir verdad, sí, lo era; porque era un enamoramiento de segundo de primaria, y no era nada ordinario ni siquiera era un enamoramiento infantil, era lo que hasta hoy en día recuerdo, porque a diario temblaba cada cuando se sentaba enseguida de mí, cuando me convertía en la persona más feliz del mundo al ver que sus ojos no se apartaban de los míos solo porque me arreglaba mi copete. Yo sabía que era correspondida, como también sabia que en primaria nadie sabia tener amor mas que el de sus papas y el de sus "mejores amigos", así que decidí alejarme por miedo a las criticas y a los maltratos que a esas edades se dan (ustedes saben, un "cortalas para siempre" o "buacala juntarse con los niños"); cuando me alejé, me entere que el también se había enamorado de mi, para ello yo ya había estado de escuela en escuela porque o "no me adaptaba bien" según mis padres o "el director era mal director". En realidad, nunca supe conservar una amiga de primaria, porque yo siempre desaparecía y a los maestros (en ese tiempo a las 'Misses') les molestaba realmente que yo no dijera ni una sola palabra ni en clase, ni en el recreo, era yo con mi hermano y sus amigos que siempre conseguía en cualquier lugar.
Recuerdo que "mis mejores amigas" en primaria, eran solo "mis mejores" porque o eran novias de mi hermano o les gustaba, es cuando comprendí que debía buscar un nuevo camino donde mis amigas no se involucraran con mi hermano. Paso el tiempo y conocí a esta chica Holandesa (que su mama hacia los mejores hot-cakes holandeses del mundo), que lamentablemente, no recuerdo su nombre... pero bueno, si, la conocí, era seria, tanto como yo, creí que podría por fin tener una buena amiga con la cual pudiera conversar de las cosas no tan femeninas que en ese entonces a las niñas les gustaba, pero resulto que se regreso a Holanda una semana después de haber estado en mi primaria nueva.
A decir verdad, tuve muchas pequeñas mejores amigas, que desaparecieron o se fueron, o simplemente hicieron amistad con un ex. Pero no importo, porque como ellas me olvidaron, yo también las llegue a olvidar, hasta ahora.
Es muy gracioso que el mismo tiempo te lleve con las viejas personas que alguna vez conociste e inclusive llegaste a ser cercano, y quizás no te lleve directamente a esas personas, pero te llevan a otras en las cuales la personalidad es muy parecida al viejo amigo de la primaria, o a ese viejo sentimiento de felicidad que presenta un niño de siete u ocho años, que espera un pastel para cada cumpleaños.
Me gustaría, algún día volver a reencontrarme con cada una de las personas que he conocido y se han convertido en parte de mi, porque sin ellas creo que jamas hubiera podido hablar con alguien, porque seguiría teniendo miedo de lo que me puedan cuestionar.

No hay comentarios: