Mulí, Mulí

Mulí se llamaba, un nombre poco común para ser nacida por estos rumbos.
A Mulí le gustaba dormir en el pasto verde a pesar de sus reacciones alérgicas, no era muy social, pero era decente. A Mulí le pasaba siempre por sus pensamientos que algún día ella moriría en un accidente, lo cual le provocó toda su vida tener absoluto cuidado con cualquier cosa que tuviera neumáticos u objetos puntiagudos, pero Mulí siempre era Mulí.
Mulí buscaba a sus alrededores algo inspirador para lograr plasmar una imagen en su memoria fotográfica y llegar a casa, encerrarse en su pequeño cuarto cubico y pintar todo el día, toda la noche. Mulí no descansaba dibujaba poesías, pinturas vivas, absorbía la felicidad de una sola persona en una sola imagen, robándoles la sonrisa a aquellos que la veían, ella tenía un don y no era nada extraño, Mulí podía impactar a todos a aquellos que lograban leer su poética pintura, sin embargo, Mulí no era feliz así que murió de efectos secundarios de una alergia o tal vez era sida.

La neta ando bien seca, simple y aburrida. A demas de que esto me recordo a un viaje muy interesante con mi diseccion que hice en Wendys. Bah.